Terminaba agosto cuando Gloria y Juan unieron sus caminos en una bonita mañana de verano. Gran pareja que estuvo arropada por su familia y amigos. Gracia, mi compañera fotógrafa y yo, disfrutamos de grandes momentos. De momentos cargados de emoción con el mar de olivos jaenero por testigo.
Nos quedamos con la simpatía de Juan y Gloria. Nos quedamos con esa preciosa sonrisa de Gloria que no desapareció ni un segundo. Nos quedamos con los nervios de Juan. Nos quedamos con todos su amigos que nos dieron grandísimos momentos.
Os dejo un pequeño resumen de su gran día, contándonos con imágenes como fue todo. Suena «A mis cuarenta y diez» del gran Sabina, versionada por los magníficos M-Clan y Alejo Stivel mientras termino de escribir esto.