Para nosotros, todas las parejas que confían en nosotros son iguales de bonitas. La relación que nos queda con ellas es de amistad, y va más allá de un frío trato comercial fotógrafo-clientes. Es en esa relación donde se crean vínculos y en esos vínculos es donde algunas parejas se te quedan en el corazón.
Todas las parejas las llevamos en el corazón, aunque hay algunas, muchas por suerte, que se quedan más profundamente guardadas. Con Fátima y Daniel nos ocurre eso.
Para que un reportaje de boda sea perfecto y el mejor del mundo, no basta con hacer fotos bonitas. Hay que plasmar los sentimientos de la pareja, de su familia. Hay que humanizarlo. Nosotros no vendemos fotografías. Vendemos recuerdos.
Fátima y Daniel eran conscientes de que compraban recuerdos. Por eso su reportaje de boda es humano, cercano y cargado de todas las emociones que se vivieron ese día. Y por qué no decirlo, también hubo muchas fotos bonitas jejejeje…
No me extiendo más. Os dejo con un resumen de su bonita boda.
